Thursday, June 18, 2009

Vuelve el Departamento de Quejas...

Ps que onda...
Hace mucho que no escribía; la neta me daba weba. Pero como que ameritaba un momento como el que a continuación describiré, para sacar nuevamente mi buzón de quejas, berrinches y lloriconeos...Más queja que todo lo demás, y pues si, es catarsis, para eso sirven estas madres de blogs. Así que comencemos. Espero ser corto, para "NO ABURRIRLOS"...ajiu! ajiu!
Creo que ya he hablado muchas veces de esto de la veracidad del contenido de las cartas cadena. Todos saben perfectamente que destesto que me manden ese tipo de correos; claro, hay unos que si los veo quizá por el maldito morbo o porque están jode y jode "iralo wé! neto! está rechido wé!" y ya para no herir sentimientos les echo una miradita. Quizá sea una maldita contradicción el decir "ai jeit de fokin cadenitas!" y abro algunos que me mandan; pero, el punto no es ése. La onda está en que independientemente de que se crea uno o no las tonteras o las maravillas que nos mandan hay otro tipo de correos que neta si están muy mal pedo. Olvídense de las "increíbles fotos de un duende maldito que tomaron unos soldados de timbuktú "; del video chistocito del bebé que hace bombitas con sus mocos o de las terribles consecuencias que la "araña del río del Tepejí causa cuando entran a tu vello púbico y se comen toda tu pipí", nel.
Hay unos correos que comenzaron desde años atrás -muchos años- y que gracias a una plática con Sebastián recordé. Pues bueno, pa' no hacerla tan larga resulta que la otra vez me llegó uno de esos correos donde decía que "las buenas nuevas del señor santo de sabe dónde" andaba con todo y que ese santo es bien cabrón cumpliendo deseos y que si me llegaba dicho correo que en ese momento leía me iba ir super chingón, que porque el origen tiene desde pinche ciudad perdida de Brasil (o la ciudad que quieran del mundo) y que un tal "Reinaldo Rivadeneyra" (o el nombre que quieran ponerle) comenzó tal cadena porque él estaba en la pinche ruina y que lellego el santo del sabe qué y le dijo que ya no fuera tan egoísta y que sus sueños se cumplirían mandando cien (o la cantidad que ustedes quieran ponerle) cartas a desconocidos deseándoles lo mejor del mundo y la madre...lo creepy es que el "santo" le advertía que si no mandaba las cien cartas que le iba caer la "maldición de sabe qué madres" y jamás iba tener suerte y que hasta se podría morir...
Esas cartitas recordamos que tiene un chingo cuando el internet ps nomás salía en las películas de ciencia "fitsión"...y cuando t ellegaba cierta cartita acá a tu buzón real, de papelito, sobre chido y con tu nombre o así nomas el sobre sin remitente ni destinatario, pues era así como que el sentimiento de "¡a weeebo! ¡tengo correspondencia de un desconocido!"...Probablemente era un vecino imbécil o un tarado de tus amigos de la escuela que sabía donde vivías. Que mal pedo. Osea, por un lado como entretenimiento pues órale, esta chido, gastarse como cien sobres y una libreta o en fotocopias y tomarte tu tiempo para mandar esas cartitas, porque sino te podría caer la maldición de sabe qué putas...y si no eras muy suceptible a eso, pues lo hacías por jodón o por aquello de "¿y, si es cierto eso de la maldición? ¡nel, mejor por si las dudas!..."
Pues bueno, todas esas cartas pensábamos que se habían perdido en el limbo y que eran parte de un pasado que nunca volverá mas que en tazos...volvieron en forma virtual. Ahora, me las mandan mis cuates o conocidos por vía e-mail, como cadenita...pero, lo que platicaba con el Sebas era que, pues chido por el detalle y el tiempo que se gastaron pero, como que desearles mal pedo y maldiciones a tus cuates, en dado caso de que uno crea o que el otro babas se la crea pues está cabrón, ¿no? Digo, si es tu cuate no vas a mandarle esa clase de mamadas, por mucho que sea verpidico o no. Es mala vibra. La mala vibra...si...eso de los hippies...y los idiotas de los ravers...esos son material para otro post...pero ya me dio harta webonería...saludos.